MLB: ¿POR QUÉ COOPERSTOWN? LOS FACTORES QUE DEFINIERON LA SEDE DEL SALÓN DE LA FAMA
El Salón de la Fama de la MLB abrió sus puertas al público el 12 de junio de 1939
El Salón de la Fama de la MLB abrió sus puertas al público el 12 de junio de 1939, y su sede fue establecida en Cooperstown, Nueva York, por diversas razones históricas. Existen varias versiones sobre por qué se eligió esta pequeña localidad para albergar tan importante institución.
¿Cuáles son los historia del nacimiento del nicho de los inmortales?
Una de las teorías sugiere que en 1935, Stephen Carlton Clark, un adinerado empresario originario de Cooperstown y miembro de la familia fundadora de las máquinas de coser Singer, decidió crear un espacio para exhibir su colección de objetos deportivos.
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Acompañado de amigos que compartían su interés, Clark impulsó el proyecto, y fue Ford Frick, entonces presidente de la Liga Nacional, quien propuso la idea de incluir un Salón de la Fama para rendir homenaje a las grandes figuras del béisbol.
Otra versión apunta a que Cooperstown fue seleccionada debido a la devastadora crisis económica de la Gran Depresión, que afectó gravemente a la región. En este contexto, se pensó que la creación del Salón de la Fama podría atraer turistas, estimular la economía local y generar nuevos empleos en una zona muy golpeada por la crisis.
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Por último, hay quienes defienden la teoría de que Cooperstown fue elegida porque allí, en el siglo XIX, Abner Doubleday, un oficial militar estadounidense, habría inventado el béisbol. Aunque esta hipótesis carece de documentación histórica que la respalde, se mantiene como una creencia popular que contribuyó a la identidad del béisbol en Estados Unidos, además de vincular la creación del deporte con la figura heroica de los soldados.
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A pesar del paso de los años, el Salón de la Fama nunca ha sido trasladado y, dada la atmósfera única que crea la pequeña ciudad de Cooperstown durante la celebración de los aficionados, parece poco probable que se mude en el futuro. En una ciudad más grande, la vibrante energía que se experimenta en Cooperstown probablemente no sería la misma.
Fuente: Internet
